Tenga presente que el divorcio destruye su vida y la de su familia |
1.
Lectura Bíblica: Mateo
10:5, 9; Lucas 11:28
2.
Meditación familiar:
Jamás olvide que el divorcio no ha
sido ni nunca lo será, un estado que Dios haya contemplado. El divorcio, por el
contrario, es la ruptura de algo que Dios instituyó como lo es la familia.
En
alguna ocasión un grupo de judíos fueron ante el Señor Jesús para preguntarle
sobre el divorcio. “Jesús les respondió: —Moisés
escribió ese mandamiento solo como una concesión ante la dureza del corazón de
ustedes, pero
desde el principio de la creación “Dios los hizo hombre y mujer”. “Esto explica por qué
un hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su esposa, y los dos se
convierten en uno solo”. Como ya no son dos sino uno, que nadie separe lo que
Dios ha unido.”(Mateo 10:5-9. NTV)
Les
ruego que lea de nuevo la enseñanza del
Señor Jesús. ¿Acaso alguna vez ha contemplado la posibilidad de separarse?
Tenga presente que está yendo en contravía de la voluntad de Su Creador.
¿Qué hacer entonces? Orar. Es el
camino para que nuestro amado Señor haga posible lo imposible. Nuestro Dios
es un Dios de milagros, y si Él es el Dios de la familia, Él transformará su hogar.
Cuando
Dios ocupa el primer lugar en nuestra relación matrimonial, absolutamente todo
cambia. Los problemas se resuelven, hallamos salidas a las crisis, y de verdad
podemos decir que avanzamos hacia la
Nuestro
Señor Jesús impartió esa valiosa instrucción: “«Pero aún más bendito es todo el que escucha la palabra de Dios y la
pone en práctica».”(Lucas 11:28. NTV). Poner a Dios en
primer lugar y aplicar los principios y valores que nos enseña, son el
fundamento para ser felices.
Es
fundamental que rindamos nuestra familia a Aquél que creó la institución
familiar. Él sabe cómo hacer las cosas, y nos ayuda a resolver las
dificultades, como enseña el apóstol Pedro: “Así
que humíllense ante el gran poder de Dios y, a su debido tiempo, él los
levantará con honor. Pongan todas
sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de
ustedes.”(1 Pedro 5:6, 7. NTV)
La
felicidad al interior de la familia es posible cuando Dios gobierna todo lo que
hacemos. Hoy es el día para rendir nuestro hogar en Sus manos. Podemos tener la
certeza de que no nos arrepentiremos. Si no ha recibido aún a Jesús como el
Señor y Salvador de su vida, hágalo. Es la mejor decisión. Si
tiene alguna inquietud, por favor, no dude en escribirme a pastorfernandoalexis@gmail.com o llamar al (0057)317-4913705.
© Fernando
Alexis Jiménez
3. Oración al terminar la Célula familiar:
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